El famoso matador de toros se disponía a realizar la suerte rutinaria del descabello. Los aficionados, como una jauría humana, le pedían al diestro con la misma señal del pulgar hacia abajo, que usaban los emperadores Romanos, la muerte del astado. Las graderías gritaban exaltadas, esperando la culminación de tan dantesco espectáculo. La consumación en pleno modernismo. De la crueldad y muerte planificada de un ser vivo. No para la sustentación básica de alimentación. Sino para ser utilizado por momentos. En la satisfacción absurda del morbo humano. Para la humillación y burla por parte de las miles de mentes enfermizas. Que presenciaban, con dantesco deleite el deprimente espectáculo. Desde incontables minutos anteriores. El bravo toro de lidia, había sido sometido a toda clase de torturas. En cuatro ocasiones había sido picado profundamente. La sangre de sus adentros brotaba como un manantial de muerte. Desde ese momento, comenzaba a escapar la vida del noble animal. En su instinto cerebral. Casi perdido por el dolor, y presintiendo la buena, o mala suerte del descabello. Los lánguidos ojos grises de la moribunda criatura, se alzaron perpendicularmente al rostro de su verdugo, casi suplicándole un acto de clemencia final. Instintivamente, reaccionó su agonizante cerebro, y alzándose inexplicablemente sobre sus patas delanteras, y llenándose de dignidad ante la indignidad. Realizó con un rencor mas que explicable, su ultima embestida. Levantó completamente sus 512 kilos, y ante la incredulidad de los presentes. Se incorporó de la arena bañada de sangre, Y penetró su aflojado pitón derecho a través de la vejiga del ya no tan valiente verdugo. No sin antes haberle desgarrado el testículo izquierdo. El chorro de sangre bañaba las rostros de los que lo transportaban. La multitud a coro. Gritaba sobresaltada. El moribundo matador era trasladado por sus compañeros a la enfermería de la plaza. Para intentar que los galenos realizaran el milagro de salvarle la vida a tan desafortunado diestro. Los médicos se miraron la cara unos a otros, nada se podía hacer. El verdugo había recibido una dosis fatal de su propia medicina. Acababa de morir desangrado tras la búsqueda de la gloria y la fama. A costas de un incomprendido animal. Que lo único que había hecho, era tratar de defenderse de tan sangriento asedio por parte de una cuadrilla asesina. Aupada desde el comienzo por una incontrolado frenesí colectivo.
Esa tarde gris, el público abandonó la plaza satisfecho. Su sed de violencia y sangre, había sido retribuida con creces. Se desangró la victima, y se desangro el victimario. Que tarde para el remordimiento de las conciencias. Después de los lamentos iniciales por la muerte del matador. Las tabernas adyacentes a la plaza abarrotaron su capacidad. Los taberneros, enmascarados de una doble moral, saltando por dentro, y taciturnos por fuera. Mostraban profundamente afligidos su cara externa. La hipocresía inicial de los gestos de dolor llegó a su fin. El alcohol para esos momentos, ya había transformado en risas los llantos. Los cantes hondos, en alegres canciones. Las tristezas en algarabías, y surgieron los comentarios estúpidos e irónicos de lo sucedido. ¿Pero como no se dio cuenta ese tío que Pintáo tenia fuerzas, después de tantos pinchazos?, de tanta sangre derramá, quien lo iba decí...bueno, quien lo manda, hay le queda la viuda, y te aseguro Curro, no va sé tan famosa como la Belén. Porque este, descendientes no dejó… ¡ y muertito ya esta!. Y te digo… y si la viudita va tené que se mi nueva novia…esta, la de España…me quedo solterón Currín.
Las anécdotas negras continuaron hasta el amanecer. Al día siguiente todos se dirigieron a sus respectivos trabajos a comentar la ya famosa quinta corrida. Y por los hangovers ( malestar generado después una intoxicación etílica ) colectivos. A a tratar de trabajar lo menos posible, algo ya muy común en estos últimos tiempos de incremento del gandulismo . De la eliminación de nuestros símbolos religiosos. De dominio de la antimoral. Imagínen, que se expenden consoladores en los kioscos de revistas. Que le respondería un padre a su hija al preguntarle esta. ¿ Papi, que es eso?, ¿ para que sirve?. ¡A donde hemos llegado!. No es que yo sea un puritano. Pues, como a la mayoría de las personas me encanta el sexo. Pero llegar a estos extremos en nombre de la Libertad. ¡No fastidie usted hombre!. Eso no es libertad, eso se llama ¡libertinaje!. Cada cosa en su lugar, y para variar no podía faltar el Gandulísmo. La flojera genérica a la que nos ha arrastrado el gobierno de turno. Los empleados públicos al regresar de sus eternas vacaciones, y días libres o festivos. Lo primero que hacen es comenzar a planificar cuantos puentes habrán el próximo año. Quiero recordar a mis queridos lectores, que las grandes naciones se han edificado sólidamente a fuerza de trabajo. Véanse los casos de: Estados Unidos, Japón, Alemania, Gran Bretaña, China, Canadá etc. ¿Cómo se construye un país desarrollado de esta forma en que vivimos?. Donde el slogan principal es el antagonismo del trabajo. Precisamente la actitud contraria de nuestro querido pueblo originario Guanche. Que no trabajaban para vivir, vivían para trabajar. Bueno volviendo al grano. No se si habrán notado, que en los comentarios anteriores de la tragedia dominical. Nadie recordó al pobre Pintao. Un noble animal, que fue forzado a entrar a un ruedo repleto. Rodeado por una multitud, que vio lo que quería ver, sangre, sangre y mas sangre. Esto amigos lectores, me recuerda la misma sed de sangre que tenían los asistentes al Coliseo Romano, cuando se embobecían al ver correr la sangre de los gladiadores, o disfrutar al presenciar. Cuando personas eran devoradas vivas por hambrientos leones, para satisfacer el innato morbo del ser humano. El contraste radica en la diferencia de épocas. Para comprender lo realizado en el pasado. Comparándolo con la época actual, existen mas de 2 milenios de atraso. pero subliminizar esta violencia, esta sed de sangre, este maltrato y esta obsesión desesperada por la violencia en pleno siglo XXI. cuando ya se ha comprobado por los Astrónomos la existencia de vida en un Exoplanéta a 20 años luz del nuestro ( ya les contare al respecto en una próxima ocasión), y que aquí continuemos exaltando la muerte. Llevando al sufrimiento total y extremo a un pobre animal. Prácticamente legalizando el maltrato a un ser vivo, que lo único que tiene para defenderse es su fuerza bruta y su ornamenta. Me parece el mayor de los exabruptos. Todo en nombre de algo que llaman tradición, españolidad. Saliendo también a la palestra pública, connotados políticos y políticas defendiendo tales practicas. Inclusive afirmando algunos..." Sin toros, España no seria España". Please, what are you talking about?. (¿Por favor, de que hablan? ). Que forma de pensar tan arcaica, tan primitiva, tan pleistocénica, tan Cromañonica. Pienso que lo dicen como una forma de buscar votos para próximas elecciones, y si no es esta la razón. Los invito a que se dejen abanderillar los lomillos, para que sientan por un instante lo que siente el de Lidia, atrévanse y veamos (cuestión que pongo en duda).
Particularmente siempre me ha fascinado el arte del toreo, por que en realidad lo es. Pero todo cambia cuando empieza a correr la sangre, la mayoría de las veces por parte del animali. Pero considero que el arte de la Tauromaquia tiene salvación. Siempre y cuando cesemos de infligir daño físico al pobre animal. ¿Porque tenemos que hacerlo sangrar hasta perder completamente sus fuerzas? ¿Eres un buen torero?…bien, demuéstralo en igualdad de condiciones. El tiene la fuerza, y tu la inteligencia. Demuestra realmente tu arte torea. No lo desangréis picándolo una y otra vez. No les clavéis banderillas. Simplemente haz lo que sabéis hacer…torear.
En cuanto a lo de entrar a matar, también tiene solución. Con las tecnologías modernas, bastaría solamente con colocar un chip sobre la piel del animal, por donde virtualmente entraría la estocada perfecta. p
Pero eso si valiente torero. Tendrías tres oportunidades solamente para tocar ese punto, con una espada con la punta fabricada de tal manera, que no penetre su piel. Si lo hacéis, la gloria muchacho, pero si no, recibiríais el mas contundente abucheo de la graderías. ¿Os atreveríais?. En esta hipotética pero factible situación. Los únicos que se quedarían sin trabajo serian los picadores (insoportable oficio). Pero para no enviarlos a engrosar las largas colas del INEM, los mandaría a pinchar papeles en las plazas públicas. Al final de cuentas todos felices. Los ganaderos con un negocio cada día mas lucrativo. Los promotores, no tan solo con mas perras, mas perros y mas perritos. Los banderilleros seguiríais haciéndolo sin penetrar la piel del astado, se podría inventar un dispositivo para colocar las banderillas sin causarle daño al animal. Sin penetrar su piel. Simplemente que quedasen pegadas al contacto. Al menos que los políticos, decidan asumir mi propuesta y dejarse abanderillar (cuestión que vuelvo a dudar ) , el torero a demostrar realmente su valentía y su arte. El publico con sed de sangre. Les recomiendo llevarse al ruedo unos bocadillos de morcilla con unas cuantas cañas bien frías…ah! No me podía faltar el actor principal. El torillo, el de lidia. El animal que hubiese demostrado su coraje y valentía. Lo pondría en un corral VIP con una hermosa vaca mariposa, a procrear ternéses y todos contentos. Menos mal que en mi querida Canarias esa practica Tauro Maquiavélica fue abolida hace años atrás.
¡POR UNA CANARIAS LIBRE!..."No al maltrato animal". Les dejo la sugerencia. Hasta la próxima.
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