EL MOLINO ROTO

I

Me quede dormido soñando contigo,

cruel cordura de fantasmas vestidas de árbol,

atravesó el tiempo cuidado por raíces,

tu espacio sutil en forma de viento,

besando tu cálida frente,

mojada en la fiebre que unía dos almas,

por el istmo estrecho de tu blanca sal,

unidas por olas seguidas de almas,

cayó sobre el techo la mano sin guantes,

de índices abiertos cual rotas cadenas,

quedando tus uñas marcada en mis penas,

soy uno…no, dos ó tres, mi mismo rival,

que miraba un cielo cubierto de ganas,

adultera poesía, ya no entiendes mis verjas,

en cual dimensión, se cruzaran nuestros labios de madera,

rotos por la traición del viento del norte,

llanto de las aspas rotas clavadas en la arena,

ceso de girar la espiral… el molino,

no hubo mas agua…descansa,

déjate llevar por el remolino,

al final nos alejara,

hasta ese mundo nuestro, sin aire…sin muertos,

volveremos a girar,

en sentido opuesto al viejo reloj del tiempo.

nuevos aires de alisios frescos,

sin relojes de arena, 
colgados al aspa de un molino nuevo, 
tu amor...y el nuestro.